Fue la principal novedad este año y las opiniones han sido muy positivas
En Miedes de Aragón prácticamente la totalidad de la localidad se une estos días para preparar lo que fue una edición más de su Belén Viviente, una muestra del trabajo colectivo de una localidad mezclado con la tradición de estas fiestas navideñas.
La principal novedad de este año fue la decisión de pasar de realizarlo por las calles de Miedes a hacerlo en el convento de la localidad. De esta manera se evitó los rigores de la climatología y aunque fue algo más corto, la realidad es que todo el mundo quedó muy satisfechos. Desde Miedes nos cuentan que “estuvo genial y gustó muchísimo dentro del Convento”.
Una opinión también compartida por los protagonistas de la actuaciones, los actores y actrices, además de los patrocinadores del mismo y de las asociaciones que no pararon de colaborar durante toda la jornada.
El esfuerzo, una vez más daba sus frutos enfatizando en varios aspectos, “la sensación fue muy buena, las interpretaciones fantásticas y todo nos lo hacemos nosotros”.
Fueron 2 pases los que se realizaron de la interpretación con más de 240 personas que acudieron a la cita. “Todo fue muy bien, el chocolate súper rico, la iluminación perfecta, el equipo de audio…, todo muy bien”.
Con el Belén terminado, desde Miedes de Aragón ya se encuentran pensando en mejoras y alternativas para el próximo año.
